Pech Maho es una antigua zona comercial fortificada que ya antes de la época de los romanos constituía un punto de encuentro para los navegantes del Mediterráneo. Después de Yves Solier, Eric Gailledrat y su equipo reanudaron las excavaciones en este lugar, misteriosamente destruido durante el siglo III a. C.
Fundado en torno al año 560 a. C. por los pueblos indígenas locales que ocupaban el territorio antes de la llegada de los romanos, el oppidum de Pech Maho fue, durante 3 siglos, un importante punto marítimo. Era el núcleo de los intercambios comerciales mediterráneos entre los fenicios, los etruscos, los griegos, etc. Gracias a su excepcional ubicación sobre el río Berre y el antiguo golfo, se convirtió en una unidad política y económica esencial, con un increíble dinamismo. Las excavaciones arqueológicas han revelado 3 áreas de ocupación continua. Se desconocen las razones de su brutal destrucción hacia finales del siglo III a. C., por lo que un halo de misterio sigue envolviendo este espacio lleno de historia.